De la comprensión al hartazgo

Algunos venezolanos se están cansando de que la familia Betancourt en el afán de recuperar a Ingrid esté haciendo de cortejo del dictador Hugo Chávez.

By Jose Benegas

Abogado, ensayista y periodista. Master en economía y ciencias políticas. Conductor y productor de radio y televisión. Colaborador de medios escritos, televisivos y radiales. Analista y conferencista internacional desde la perspectiva de la sociedad abierta y las libertades personales a las que ha dedicado su obra intelectual. Dos veces premiado en segundo lugar del concurso internacional de ensayos Caminos del la libertad.

10 comments

  1. Lo que pasa es que mamá Betancourt sueña con derrocar a Uribe y ver a la nena presidente, hace un tiempo vi una película documental sobre el caso y al principio te apena, luego te preguntas si no se la buscó y en todo el film te das cuenta del hambre de poder de la familia por sobre el drama del secuestro.

  2. Norma tiene razón. La familia Betancourt es patética y asquerosa.
    Las FARC son un grupo terrorista que debe ser eliminado y que no tienen justificación alguna, pero las barbaridades de esta familia no tienen perdón.
    El payasito del hijo de Ingrid que está en Francia le echa la culpa de todo a Uribe, y no sabe que lo que está haciendo Uribe es intentar que las FARC no secuestren más a nadie como lo están haciendo con su madre.
    Pero el pendejito con su cerebro de adoloscente tardío no lo entiende.
    Es lamentable lo que le pasa a esta mujer, pero recordemos que ella, cuando hacía la campaña electoral antes de ser secuestrada, intentaba “negociar y dialogar” con las FARC, o sea, al igual que Pastrna, quería seguir con el juego del grupo terrorista.
    En fin, Colombia debe estar agradecida de tener un presidente como Uribe, por eso su gobierno tiene cada vez más apoyo popular.

  3. Usar a Betancourt. Es lo que importa. Carecen de vergüenza porque no recuerdo que hayan hablado de este caso en todos los años que pasaron desde su secuestro. Bueno, tal vez hayan dicho, pobre mujer, pero nada mas. Estaba en Venezuela cuando eso pasó y no dejó de ser una noticia policial en el universo chavista. Uribe decidió no pactar mas. En Argentina ni hablábamos de esa guerra. Pero ahora todo sirve para conseguir un mm mas de poder.
    Pregunto al aire por enésima vez: ¿Y la doctora Hilda Molina? ¿no es un caso mucho mas fácil de enfrentar y resolver? ¿cuál es la diferencia con Betancourt?. Claro, quienes deberían responder seguro que no pasan por acá.

  4. El caso de la doctora Hilda Molina es revanchismo puro. Es inaceptable para el régimen que alguien que fue parte del mismo y lo conoce en su forma mas intima se de vuelta. Esto lo va a pagar no solo la doctora, lo pagará tambien, como no podia ser de otra manera, su entorno mas intimo. De hecho no tendria ni siquiera alimentos o medicamentos para su sustento y el de su madre, si los mismos no fueran comprados por su hijo en Argentina y enviados a traves de la embajada en La Habana. Esto es lo unico que acepto Castro y est es lo unico que se puede hacer al respecto.

  5. El caso de Hilda Molina está clarito:

    El estado socialista es del dueño de los medios de producción

    uno de esos medios es el trabajo humano

    por lo tanto el estado cubano es dueño del cuerpo y el cerebro de Hilda Molina.

    Es decir Hilda Molina es una esclava de Castro.

  6. Y respecto a lo de Hilda Molina, no es lo mismo oponerse a un “derechista” como Uribe, que a un zurdo pelotudo como el viejo choto Castro; oponerse a Uribe le es redituable a esta gente.

    Pero volviendo a Betancourt, es como dijeron antes, las ansias de poder de esa familia no tiene límites, y que no sorprenda que la larguen poco antes de las elecciones presidenciales para que se haga amiga de las FARC, o, que la larguen simplemente por motivos de salud, porque muerta no les sirve.

  7. una pregunta porque yo no me acuerdo y lo que leo en internet tampoco me da una pauta demasiado clara….

    ingrid betancourt, cuan progre era? que estilo de zurdaje practicaba?

  8. Antes de estar en ese partido verde pertenecía al partido liberal del que se separó por desinteligencias que tenía con Ernesto Samper.

  9. Pertenecer al Partido verde implica lo que hubiese sido su plan de gobierno, además de negociar y dialogar con las FARC.

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