Gerd Wiesler es un empleado estatal honesto, leal y eficiente. Concentrado en su trabajo resulta difícil engañarlo y se ha ganado su fama de implacable. Podría ser un perfecto espécimen del PRO o tal vez la mano derecha de Gustavo Beliz. Sin embargo la fortuna le toca y tiene la suerte de observar primero la corrupción de su jefe, para luego ser él mismo beneficiario de la degradación.
No les cuento más de la trama de esta opera prima sobresaliente Florian Henckel-Donnersmarck, un joven director y guionista alemán de apenas treinta y dos años que pinta la naturaleza monstruosa del comunismo y todas sus miserias inevitables. Por supuesto, a quienes no son lectores del blog les costará entender la descripción del párrafo anterior. Lo que todos podrán entender sin dificultad es la omisión general que encontrarán en las críticas, aún siendo elogiosas y reconociendo la justicia con que fue premiada con el Oscar a la mejor película extranjera. Se evita decir que es una denuncia contra el comunismo y si la trama no deja lugar a dudas al respecto los diálogos son más explícitos aún. A lo sumo se habla de “una mirada hacia el pasado alemán”, o destacan como circunstancia de un film “policial” que “es 1984, el gobierno alemán trata de controlar a la población”, que se trata de un drama humano ocurrido en la ex Alemania Oriental. Y la razón de esta omisión es tan clara como horrorosa, diría que es el final que todas las ex víctimas del comunismo conocen de sus propias historias que es que al llegar al llamado “occidente” se encuentran que hablar del calvario colectivista no es políticamente correcto. Todo debe ser disfrazado un poquito bajo el manto de la maldad particular de algún señor suelto que los hizo padecer. A ese sistema, prefieren pensar los mononos comentaristas que la pasan bomba, le faltaba un poco más de eficiencia y honestidad.
Es entonces cuando un director de 32 años del país en cuestión que fue sometido al horror, todavía no domesticado, nos regala una mirada libre, sin bajadas de línea, estética y directa sobre las cuestiones principales que le dan estructura al socialismo y los asuntos humanos involucrados. La vida de los otros es, una vez entendido esto, una película sobre la lealtad y la honestidad y su real dimensión contextual. Una película que deben ver los jóvenes de la Argentina para que entiendan de una vez que cosa son los montoneros, que mundo añoraban, a dónde querían conducirnos y como ahora han regresado sabiendo del fracaso de todo lo que nos proponían para otorgarle a nuestra propia película un final de pesadilla.
Es curioso pero las mayores esperanzas para que la libertad residen hoy en los países que supieron salir del comunismo. Manifestaciones artísticas como La vida de los otros demuestran que mientras parte del resto del mundo aprendió a medias una lección, Alemania pagó un precio alto pero aprendió las dos.
El relato es impecable, la dirección de lujo y las actuaciones de Ulrich Mühe (Gerd Wiesler) y Martina Gedenk (Christa-Maria Sieland ) sobresalientes. Calificación: Cinco velitas (recuerden que es nuestra contribución a la no crisis energética)
José: Los otros días escuché la crítica de Rolando Hanglin, expresó todo claramente, tal como vos lo hacés. Yo todavía no la ví, en Rosario no la estrenaron, pero espero poder hacerlo pronto. Hay una alemana anterior, en tono de comedia, que se llama Good Bye Lenin que realiza también una crítica despidada a lo que se vivio detrás de la cortina. Claramente los que sufrieron el despotismo estan inmunizados contra el comunismo.
No me sorprende de Hanglin.
Una de las libertades que está en juego en nuestro país -y en el mundo occidental, infectado por la “corrección política”- es la de pensamiento.
No he leído pero me pondré en campaña para conseguirlo -no es tan fácil en nuestras librerías- “El libro negro del comunismo”. según Wikipedia “es un controvertido libro”, traducido al español por “el controvertido” periodista español.
En la neolengua “progre”, “controvertido” es un reaccioniario al que no se quiere calificar de tal.
Julio, no lo vas a encontrar. Desapareció de todas las librerías y no hay reposición. El mundo está lejos, muy lejos de haberse librado del comunismo y hay una gigantesca colusión para no hablar de lo que no se debe.
De que manera se puede explicar que en le mundo queden dudas de que un règimen asesino, genocida que se cargò casi 100 millones de seres humanos de sus propios paìses, solo fuè eso…basura.
Cuesta creerlo, sòlo atribuyendolo a una absoluta ignorancia o una absoluta malignidad.
El terrorismo criminal argentino fuè casualmenmte alimentado por ese règimen y la basura gobernante simpatiza con ellos. Cabe un anàlisis màs profundo acaso, sin caer en el relativismo? No, estoy seguro que no.
K, el simpatizante de terroristas asesinos es un absoluto ignorante o un absoluto hijo de puta. Yo no lo califico, èl lo està haciendo con sus acciones y discursos.
Hay un título de una obra de Rothbard que es una maravillosa sintesis de lo que es el comunismo.
“Egalitarianism, a revolt against nature”
Difícilmente haya quien pudo expresarlo en tan pocas palabras.
Miguel, cuidado con Good Bye Lenin que es una critica al comunismo pero por elevacion tambien dispara al capitalismo y sino acordate de la escena en que la hija de la protagonista se va a Berlin occidental y trabajando en el McDrive de Ronald Macdonald pone sonrisas de plastico y la hacen pasar por una idiota que se limita a recibir pedidos como un robot.
Respecto de los alemanes del este, les gusto tanto el capitalismo que pasan de largo la Alemania del oeste y estan invadiendo Suiza, en donde ganan mejor y pagan impuestos mas bajos.
Ayyy, la guita, la guita…
Muy buen comentario Jose, y de Hanglin no me extraña, los sajones siguen siendo muchos mas sensatos y politicamente incorrectos que nosotros, los mediterraneos.
El comunismo es lo que occidente le devolvió a oriente a cambio del cristianismo.
La libertad sólo es valorizada donde se ha perdido. Los defensores de las libertades individuales vienen hoy en día en su mayoría de los países que eran los del ex pacto de Varsovia, porque han sido ellos quienes han sufrido en carne propia la pérdida de libertad por la esclavitud del comunismo. Es una ley de la economía, lo que escasea se valoriza, lo que abunda se desprecia.
Estos imbéciles que añoran un paraíso colectivistas serán los primeros en lamentarse cuando el sistema que buscan se se venga en contra de si mismos. Este activismo no tiene un mínimo de razonamiento, ni de sentido común. El comunismo es lo más inhumano y aberrante que ha salido de la mente humana, y lamentablemente es en las universidades donde germina.
Hay muchos sitios como blogs referidos al liberalismo, pero no encuentro material en ellos que hable de las aberraciones y los crímenes que se han cometido en nombre del socialismo-comunismo. Algunos datos dicen que las guerras ocurridas en diferentes países del mundo han dejando entre 130 y 145 millones de muertos para imponer ese sistema.
Como dice José que hay una colusión (acuerdo) para no editar material bibliográico en contra del colectivismo socialista-comunista. No se encuentran libros como el citado más arriba. Es también notoria la escasez de libros de Ayn Rand, Hayek, Rottbard, Von Mises. Pero es muy abundante la oferta de libros de Sábato, Octavio Paz, y de cualquier comunista que goza de la libertad que no les daría el colectivismo.
Sàbato, Octavio Paz, Galeano, Cortàzar, Garcìa Màrquez…comunistas de salòn y flor de HDP…ninguno estuvo de vacaciones en Gulag.
Octavio Paz no es comunista, al día de hoy. Es un desilusionado del comunismo.
Jose, el subtituolo, “In einem System der Macht ist nichts privat” es “en un sistema de poder, nada es privado”. Pensé que te iba a interesar sabelo.
Me parecio ESPECTACULAR y fue muy gratificante que muchos aplaudieran cuando se terminó.
Buen dato Teresa, muy significativo. Cuando la fui a ver la gente también aplaudió.
La película es magnífica, es la mejor que he visto este año ( aclaro que evito ver cine chatarra).Se puede dividir en dos partes: Una, la transformación que se opera en el integrante de la Stassi, la policía secreta comunista de la ex Alemania Oriental; Dos, lo execrable de la dictadura comunista, aún defendida por algunos imbéciles en gran parte de América.Yo conocí el Muro de Berlín y es una de las mayores vergüenzas que he conocido.-