Como los lectores habituales del blog saben, mi candidatura presidencial para octubre depende de cómo me vaya en el concurso de blogs de Intel que terminó hace unos días.
El resultado no se sabe todavía. Si gané voy a estar muy ocupado los próximos meses en la campaña y si perdí es porque me votaron los que piensan y la blogósfera se ha vuelto fascista.
Me imagino que habrá choripanes no? digo… porque sinó no sería una campaña presidencial !
Mucho más que eso Nicolás. Si te ponés una empresa constructora te adjudico una obra y vamo y vamo.
ajajaj… estás muy gracioso últimamente!, me sumo a la campaña, por favor algún beneficio para mi, manejar un canal estatal una radio… alguito.
Suerte en el concurso!
Canal 7 te viene bien? Si no elegí cualquier otro porque los voy a estatizar a todos. Pienso hacer un gobierno bolivariano de verdad.
con el 7 me arregló, me quitás le presión de tener que sumar puntos de raiting.
Se agradece.
Pero agarra cualquier canal Delfín, en el gobierno bolivariano no importa el rating, eso es competir y competir está mal, no sea cosa que a alguien se le ocurra poner al aire programas mejores que otros y los otros entonces tendrían que mejorar y eso no es de bolivarianos…
Muy bueno Rodrigo!, me olvidaba de ese detalle
Para nosotros estaría bien algún ministerio que se ocupe del “bienestar de los niños” o algo así. Tenemos un montón de frases conmovedoras, como para empapelar el país entero.
Marcelo y Mariana, me parece buena idea pero ¿cómo le sacamos jugo a eso? No vamos a estar cobrando titas y rodesias!
José: los niños, el medioambiente, la cultura o la “salud pública” no tienen precio… el precio lo pondríamos nosotros, y el contribuyente comprenderá la importancia de nuestra misión; ¿quién puede ser el desalmado que se oponga al financiamiento del bienestar de los niños, o de “nuestros viejitos”?, ¿y a quién se le ocurre que “nuestra cultura”, asediada por tanques hollywoodenses y blogueros capitalistas, puede sobrevivir en la selva del mercado sin un sensible Tarzán que la proteja?
El gran salto adelante recién empieza! (estamos tomando carrera).
Es verdad Marcelo y Mariana. Si hacemos un ministerio de las causas nobles nadie podría oponerse. Lo podemos financiar con el impuesto del amor. Estaríamos cerca de lograr el paraíso.
Pero claro… el impuesto del amor! Raro que no lo estemos pagando ya; es kakismo en estado puro. Qué te parece lanzarlo con ubicuos afiches que proclamen lo siguiente: “El impuesto del amor, cuanto más pagás… mejor!”, en un flamante “día de las causas nobles” (feriado nacional movible a lunes), creado por el flamante ministerio de las causas nobles.
Paraíso… allá vamos!